Uno de los grandes retos al alcanzar la libertad financiera es saber cuánto dinero puedes gastar cada año sin que tus ahorros se agoten antes de tiempo. La llamada regla del 4% es una guía popular entre los seguidores del movimiento FIRE (Financial Independence, Retire Early) para calcular un retiro seguro y sostenible.
En este artículo te explicaré de forma clara en qué consiste, de dónde viene y cómo aplicarla a tu propio plan financiero.
Qué es la regla del 4%
La regla del 4% establece que puedes retirar el 4% del valor total de tu cartera de inversión cada año para cubrir tus gastos, ajustando la cifra por inflación, y así mantener tu capital durante un período de al menos 30 años.
Por ejemplo, si tienes 500,000 dólares invertidos, podrías retirar 20,000 dólares el primer año. Al año siguiente, retirarías la misma cantidad más un ajuste por inflación (para mantener tu poder adquisitivo).

De dónde viene esta regla
Esta idea se popularizó gracias a la Trinity Study, un estudio de 1998 realizado por profesores de la Universidad de Trinity (Texas, EE. UU.). Analizaron diferentes combinaciones de carteras (acciones y bonos) y porcentajes de retiro para ver cuáles ofrecían una alta probabilidad de no quedarse sin dinero durante 30 años.
El resultado: una cartera con 60% en acciones y 40% en bonos permitía retiros del 4% anual con un éxito del 90% o más en distintos periodos históricos.
Cómo aplicarla en la práctica
- Calcula tu “número de libertad”
Determina cuánto gastas al año. Luego multiplica esa cifra por 25 para saber cuánto capital necesitas.
Ejemplo: si gastas 30,000 dólares al año, necesitarías 750,000 dólares invertidos (30,000 × 25). - Mantén una cartera diversificada
La regla se basa en una mezcla de acciones y bonos. Ajusta el porcentaje según tu tolerancia al riesgo y horizonte de tiempo. - Ajusta por inflación
Cada año, aumenta tu retiro según la inflación para no perder poder adquisitivo. - Sé flexible
Si hay años de crisis o tus inversiones bajan mucho, reducir un poco el retiro puede proteger tu capital a largo plazo.
Ventajas de la regla del 4%
- Simplicidad: no requiere cálculos complicados mes a mes.
- Históricamente probada: se basa en datos reales de más de un siglo de mercado.
- Claridad en objetivos: te da un número concreto a alcanzar para retirarte.

Limitaciones y críticas
Aunque útil, esta regla no es infalible:
- Basada en el pasado: no garantiza que los mercados futuros se comporten igual que antes.
- Horizonte de 30 años: si quieres que tu dinero dure más (por ejemplo, si te retiras a los 40), podrías necesitar una tasa más baja, como el 3.5%.
- Inflación alta: periodos de inflación elevada pueden acelerar la erosión del capital.
- Mercados volátiles: caídas prolongadas pueden exigir ajustes temporales.
Estrategias para aumentar su seguridad
- Bajar la tasa de retiro
Si en lugar del 4% usas un 3.5% o incluso 3%, reduces el riesgo de quedarte sin dinero, aunque necesitarás más capital. - Ingresos complementarios
Tener un trabajo parcial, negocio propio o alquileres reduce la presión sobre tus inversiones. - Retirar de forma flexible
Ajusta tus gastos en función del rendimiento de la cartera. Gasta menos en años malos y aprovecha para retirar un poco más en años muy buenos. - Diversificación global
Invertir en mercados internacionales puede suavizar el impacto de crisis locales.

Ejemplo práctico
Imaginemos a Laura, de 45 años, que quiere retirarse con el método FIRE. Calcula que necesita 24,000 dólares al año para vivir.
- Aplica la fórmula: 24,000 × 25 = 600,000 dólares.
- Invierte el 60% en fondos indexados globales y el 40% en bonos de bajo costo.
- El primer año retira 4%: 24,000 dólares.
- Si la inflación es del 3%, al año siguiente retirará 24,720 dólares.
- En años de caídas bursátiles, reduce sus gastos a 20,000 dólares para dar margen de recuperación a su cartera.
Conclusión
La regla del 4% es una herramienta poderosa para estimar cuánto necesitas invertir para vivir de tus ahorros de forma segura, especialmente si buscas independencia financiera. No es una fórmula mágica ni una garantía, pero sí un punto de partida sólido para planificar un retiro sin sobresaltos.
Si la aplicas con flexibilidad, diversificación y revisiones periódicas, puedes aumentar la probabilidad de que tu dinero dure toda tu vida, incluso si empiezas a retirarte mucho antes que la mayoría.